Ámame alguna vez,
ódiame también,
ámame sólo una vez,
ódiame a mí y no
a aquel,
ámame por amarte
y ódiame por no
olvidarte.
Ámame, si sabes que
te amo, ámame pero
no me ames, sólo
hay un solo riel
por el cual pasa
el tren,
llevando carga a la
estación,
aquel suena como
suena mi corazón,
aquel se sigue yendo,
mientras retrocediendo
no llegará a la estación,
llevando lo que debe llevar
y entregándolo a quién lo
debe entregar, va con
rumbo y su rumbo es
tu amor, no hay sentido
que exista un tren sin
estación, no hay sentido
en mi vida, sabiendo
que nunca tendré tu amor.
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